miércoles, febrero 27, 2013

Continuación del proyecto frikipédico

Han sido cuatro años de silencio. Cuatro años en los que este gran proyecto (la traducción y publicación del Corpus Frikipedicum) ha sido bruscamente interrumpido.

Habéis de saber que han sido varios los motivos de mi silencio.

El primero ha sido la crisis. La financiación con la que este proyecto contaba ha sufrido una merma importante. Hemos pasado de un presupuesto anual de varios cientos de euros a tener que pagarnos la leña con la que calentábamos la estancia en invierno.

El segundo, y no menos grave, facilitado por la crisis y los problemas de financiación, han sido el descrédito y los ataques que hemos sufrido. En la entrada anterior todos habéis podido leer un comentario que rezaba:

"soys subnormales"

Esto no es más que la parte visible del iceberg de insultos y amenazas que este blog ha sufrido desde hace cuatro años. Como si de una conspiración se tratara, en cuanto nuestra patrocinadora, la Fundación para el Conocimiento del Medioevo Precristiano cambió su nombre por "Fundación para la Defensa del Santo Nombre de Jesús y la Extinción de las Herejías", misteriosamente nuestra financiación ha sido reducida a un clip oxidado a fin de año y han empezado a aparecer en nuestra bandeja de entrada correos ofensivos y comentarios en el blog de mal gusto y peor ortografía como este que os puse arriba.

Pero con diferencia, lo más grave y definitivo ha sido el ataque directo que nuestro proyecto ha sufrido, y que hasta ahora no me había atrevido a contaros.

El que aquí os escribe no sólo se ha dedicado a compilar y ordenar estos textículos frikipédicos. He tenido el gran honor de participar en varias campañas de excavaciones en los yacimientos frikipédicos: zonas de Galicia mencionadas en el Corpus y en las que teníamos la sospecha de que perduraría algún resto de la antigua grandeza pastafárica. En junio de 2010 he participado en un increíble descubrimiento arqueológico. Se trataba de un hallazgo tan importante, tan extraordinario, que haría cambiar los libros de Historia. Ante nosotros teníamos los mismísimos restos de la mítica ciudad de Coruvigo, la legendaria capital de Gondwana. Unos hermosísimos relieves eróticos y textos en escritura proto-pédica habían sido encontrados en las inmediaciones de Hospital do Incio, en O Courel.  Allí hallábame yo con el insigne doctor Varelov, gran estudioso de la cultura pastafárica precristiana y sin cuyos generosos aportes jamás hubiera sido posible este magno proyecto, cuando el puesto fue atacado. Unos extraños (probablemente del grupo antipastafárico ultracatólico "Amanecer Cruzado") se acercaron al puesto mientras estábamos realizando nuevas catas de los estratos sedimentarios en los alrededores. Con algún objeto contundente destruyeron las bellísimas estelas, reduciéndolas a polvo. El fragmento más grande que ha quedado es de apenas tres centímetros de largo. En su saña destructora, también quemaron nuestras notas y destruyeron nuestros equipos. La operación, lejos de ser mero vandalismo, incluyó el borrado de archivos informáticos en nuestras sedes de Lugo y Sanxenxo, más un ataque "hacker" a nuestras cuentas en Google, con el blanqueado total de nuestras copias de seguridad en la Red. Una nota manuscrita con espantosa ortografía fue dejada en medio de aquel destrozo. "Dejaz adios enpaz. Ho dejais d vuskar piedritas ho la prosima ved hiremos ha x bosotros".



Los intentos de denunciar estos hechos han sido infructuosos. Nos han dado largas, malas constestaciones o silencios administrativos. Un amigo juez, en privado, nos ha aconsejado huir, salir de la zona. Realmente, tanto Varelov como yo y el resto del equipo de excavación, hemos visto que dada la furia y la impunidad (protección, diría yo) con la que estos delincuentes cuentan, lo más sensato era hacer caso. Varelov ha vuelto a Ucrania. Otros miembros del equipo han vuelto a sus lugares de origen o a casa de sus padres. Yo he emigrado a Andalucía: actualmente os escribo desde Málaga. Me ha llevado tres años recomponer mis archivos, y lo cierto es que tampoco hasta el momento he tenido ni mucho tiempo ni muchas ganas de continuar con este proyecto, por la mezcla de miedo y desánimo.

En la actualidad, empero, creemos que es posible retomar el proyecto. Nos llevará algún tiempo, porque las prisas para huir han provocado que parte del archivo original se perdiera o se quedara en Galicia, y que la parte restante se haya desordenado notablemente.

Supongo que en unos meses al fin podremos sacar a la luz nuevos textos y puede que alguna de las magníficas ilustraciones que les acompañarán.

Sin más, me despido con el tradicional saludo pediense, en el que el interlocutor preguntaba amistosamente y con gran curiosidad sobre los proyectos futuros:

"OLA K ASE"

que puede traducirse de forma libre como "Te saludo, amigo. ¿Qué te traes entre manos?".

miércoles, noviembre 11, 2009

Como alcalde vuestro que soy, os debo una explicación...

Frikipedio el Caballero lo hemos dejado la última vez renunciando a su trono, preparándose para la partida a lueñes tierras... y lo cierto es que de eso hace mucho. Meses. La última vez que estuve transcribiendo los textículos de Frikipedio aún era invierno. Y ahora se acerca el invierno. Casi un año. En ese tiempo he vivido nuevas experiencias; en lo profesional, en lo familiar... para febrero-marzo esperamos un nuevo vástago de la saga Varela-Martín...

En fin. Este blog lo he tenido desatendido más de lo ya habitual, aunque no obstante no he dejado de pensar en Frikipedio y sus gestas. Os prometo que volveré con nuestro héroe en cuanto pueda. Y seguramente, lo primero que haga es prepararos una edición de lujo en PDF de los textículos ya publicados, pero con las ilustraciones que mi mujer, la pintora Carmen Martín, ha preparado y que por cierto aún no he tenido la oportunidad de ver ni siquiera yo.

Quizá esté hablando para el inmenso vacío espacio-temporal que nos envuelve. Pero si todavía queda, fiel, solitario, algún lector que secretamente guarda la esperanza de ver rematada la Gesta de Frikipedio, que sepa que agradecido, y quizá con lágrimas en los ojos, pagaré su esfuerzo, su inmensa y generosa paciencia, con nuevas aventuras que prometo serán sorprendentes y maravillosas, y unas ilustraciones que ya quisieran para sí muchos códices medievales.


viernes, abril 24, 2009

Próximos textículos, próximamente

http://www.untoldlondon.org.uk/diversity/content/images/bl_jewpersec250x159.jpgEstos días he estado sumamente liado, pero prometo que pronto me pondré a trabajar en los siguientes textículos (11 y siguientes, hasta el final). Veredes grandes marabillas e sorprendentes fechos. Xúrolo.

martes, enero 27, 2009

Textículo X - Comienza la partida

Por fin, después de tanto tiempo desde que publiqué el Textículo IX, aquí está el X. Que lo disfrutéis tanto como yo al volver a este trabajo:

Relato en Textículos de las Gestas y Fazañas del Valiente y Nunca Bien
Ponderado Caballero Frikipedio, paladín de la Justicia y el Honor,
Héroe de la Triunfal Batalla de Eirís, adulto consumado,
Conde Pastafarísimo de Pedia y su pedanía
y Centurión del Exército de Gondwana.
Y otrosí de las cuitas y placeres que
le causaron sus arriesgados
amoríos con la Simpar
Inciclopea

*




Textículo X
Comienza la partida
De vuelta a Pedia, nuestro héroe, Caballero, Conde y Centurión, pudo gastar varias jornadas ordenando sus aposentos, y preparando los asuntos del Condado que debían ser resueltos durante su ausencia. Aunque ansiaba salir a pelear, sentía que su partida no tendría retorno. ¿Qué ignotos peligros le acecharían?


Frikipedio sabía de cierto que tras la marca asturíaca le esperaba el antiguo monje Ramonicum, hoy general cristiano, que seguramente le guardaría algo de rencor por haber sido, de niño, responsable de haber quedado sin dídimos1 que adornasen su viril orgullo. Verdad era que aquel episodio hubiera podido evitarse si el monje Ramonicum no hubiera sido tan porfiado. Pero las cosas habían sido de aquel modo, y ya nada podía recomponerse.
Por otra parte, Judas, el antiguo rey de Gondwana, traidor a su patria, tenía justa fama de negocioso. Durante su reinado gallego había conseguido que los asturíacos devolvieran la preciada plaza de Ribadeo. Ahora, esa habilidad de unir intereses estaba en contra de Pangea. ¡A saber con qué enemigos podría haberse aliado ya! Se decía que en los bosques donde el Traidor se ocultaba con su ejército, vivían seres fabulosos y temibles, como los canguros asesinos, la hidra de múltiples cabezas, las damas de velos blancos y hasta la temida Bruja Piruxa. Si a ellos se unían ogros, trasnos y otras criaturas menores, la batalla estaría perdida, antes incluso de comenzar.
Sólo restaba confiar en el buen juicio de Rataube I, el nuevo rey, al aliarse con el emperador asturíaco, Bable II el Oscuro. Pero por añadidura, ¡sería menester que las tropas de Krusher se mantuvieran fieles a su juramento!
Frikipedio ocupaba su mente en aquestas tribulaciones, mientras esperaba su centuria, que poco a poco estaba siendo reclutada a la fuerza entre sus súbditos de mayor confianza. Al tiempo, despachaba los asuntos más urgentes de su gobierno con ayuda de su madre, la gentil Uncyclopedy, que gobernaría el condado cuando él faltase.
Mas casi cuando ya todo estaba en orden, escuchó noticias turbadoras. Más turbadoras incluso que su incierto destino en tierras extranjeras. Más turbadoras hasta que la perspectiva de encontrarse, cara a cara, con las damas de los velos blancos o la terrible bruja Piruxa:
Su padre, Sir Wikifredo de Entrerredes, volvía de Roma.
Era un rumor, lo comentaban donceles y damas de compañía. Lo comentaban en las tabernas y en las plazas de los pueblos. Pero se diría que el cielo lucía de otro modo y que a lo lejos, el bramido formidable de la voz del antiguo conde acompañaba a las tormentas, y no los truenos.
Frikipedio ansiaba, ahora sí, partir. Ante la vuelta de Sir Wiki era inevitable la confrontación. Las leyes pedenses eran muy estrictas respecto a las sucesiones, y el flamante joven conde sabía que si se encontraba con su padre, tendría que luchar hasta la muerte, pues como reza el lema del escudo de Pangea, “sólo puede quedar uno”. Y ese lema se ha hecho ley, de modo que tan sólo uno puede ser Rey al mismo tiempo, y tan sólo uno puede ser Conde de Pedia de cada vez.
Así pues, nuestro héroe apresuró su partida, y para evitar una inútil pérdida de sangres propias, quizá conmovido por haber en cierto modo usurpado ilegalmente el trono de su padre, al que sabía vivo2, dejó dispuesto que al regreso de Sir Wikifredo le fueran restituidos sus privilegios y estipendios, volviendo a él la pesada corona de la pedanía. Uncyclopedy, con su rubio cabello al viento, lloraba sosteniendo el documento que contenía la amarga renuncia de su hijo. Frikipedio partía.
Pero nada afligía ya a nuestro paladín. Como es sabido, una vez en batalla, un soldado vale por su gallardía, no por su alcurnia. ¡Era tiempo de servir al Rey!

Fin del Décimo Textículo

1Testículos (dedeemaas en el original). Ver textículo III: Infancia de Frikipedio

2Véase Textículo VII: Noticias de Roma


Hoy mismo, Frikipedio X

No, no os hagáis ilusiones. No se trata de un textículo porno de Frikipedio (eso ya lo tenéis en el textículo SEXto), sino del Décimo, que en números romanos es "X".

Estoy con las últimas correcciones. Este en concreto (el X) es cortito, de apenas dos páginas, pero el XI parece que va a ser de los largos. Todo depende, como siempre, del tamaño de las guardas del libro que el monje anónimo cuyo nombre ya conocéis utilizara para escribir cada parte de la narración.

miércoles, enero 07, 2009

Pronto el textículo X

Las ilustraciones de la magna historia de Frikipedio el Caballero están en pleno proceso de... ¿restauración? La experta ilustradora Carmen Martín está completando, según sus investigaciones, el proceso de restauración de las ilustraciones del magno relato.

Yo estoy sumido en la compilación y traducción del textículo X, cosa que me ha mantenido bastante ocupado dado el estado de deterioro de los volúmenes en cuyas guardas se encontraba ese textículo.

En breve completaré este textículo, en el que Frikipedio ya se dirige con su ejército hacia los territorios dominados por el indigno ex-fraile Ramonicum y sus hordas de la cruz. En ese textículo y posteriores, Frikipedio reencuentra a su amada, sufre extraños sortilegios de la malvada Bruja Piruxa...

Creo que la larguísima espera -por la que os pido disculpas- habrá valido la pena.

miércoles, septiembre 03, 2008

Retomo el proyecto

A lo largo de Septiembre retomaré la historia de Frikipedio. Esperan seis nuevos capítulos por transcribir, con sus ilustraciones respectivas.

Dicen por ahí que las historias de Frikipedio las escribiré yo, y que las ilustraciones serán obra de mi mujer, la estupenda pintora e ilustradora Carmen Martín... no hagáis caso. Todo proviene del medievo.

lunes, octubre 01, 2007

Nuevos textículos: del 10 al 16

Aunque llevo bastante tiempo sin venir a escribir aquí, sobre todo por culpa de mi blog de arte, lo cierto es que no quiere eso decir que haya desistido de seguir trabajando en esto. La traducción y compilación de los textículos faltantes va a buen ritmo. De hecho tengo ya extractados los textículos del X al XVI, y cuando tenga un ratito libre los terminaré de traducir, compilar y finalmente re-redactar y subir aquí. No quiero adelantaros demasiado, pero Frikipedio vuelve a encontrarse con viejas amistades, enemistades y amorosidades. Nuevos y poderosos enemigos le acechan, entre ellos la terrorífica Bruja Piruxa y un ramillete de monstruos y seres de leyenda que no le dejarán un minuto libre, pero a pesar de lo cual reencuentra el amor y utiliza su ingenio y sus superpoderes para librar fiera batalla contra el Mal.

Paciencia.